Hoy celebro mi cumpleaños anticipadamente comiendo con mis padres y sus amigos en el que se ha convertido en uno de mis restaurantes favoritos desde que fui por primera vez hace ya bastante tiempo. Se trata del restaurante Arrop, de Ricard Camarena y está situado en el Hotel Palacio Marqués de Caro, en una callejuela del precioso barrio del Carmen de Valencia :). El restaurante, a parte de por la exquisita comida con un carácter mediterráneo y natural pero elaborado único e inconfundible, se caracteriza por su espectacular diseño moderno que integra a la perfección los restos de la antigua muralla árabe de la zona. El resultado es una verdadera pasada.

Pero lo más importante de un restaurante acaba por ser la comida y la verdad es que, como bien demuestra su Estrella Michelín, no defrauda. Sus originales arroces no tienen desperdicio, su manera de cocer poquísimo las verduras es envidiable, su forma de cocinar el huevo, o de combinar texturas en los postres… mmmm. Me parece que voy a parar porque se me está haciendo la boca agua y aún me quedan dos horas y pico para disfrutar de esos manjares pero, para que os animéis a ir, os dejo con unas cuantas imágenes de sus platos :).

Y ahora que conocéis otra de mis pasiones (la comida rica, rica), os dejo que me invitéis cuando queráis a cualquier restaurante decente que os apetezca ;). Si no se os ocurre ninguno, no os preocupéis, yo tengo varias opciones en mente. De momento, me quedo lamentando que cuando fui a El Bulli sólo tenía 3 añitos y estaba tan cansada que me dormí y no pude disfrutar de la comida… así que me conformo con ver una y otra vez la historia que cuenta el estupendo anuncio promovedor de buen rollito y de alegría de Estrella Damm y que encaja con la filosofía mediterránea que también se desprende de Arrop :).