Ya tardaba. Pero no por mi culpa. El ser androide me lo impedía. Hasta hace bien poco que los de Instagram se dieron cuenta que el elitismo para iphonistas (por mucho que estos se quejen) no iba a ningún lado y la semana pasada decidieron admitirnos (eso sí, reconozco que las cámaras de los iPhone son mucho mejores). Así que empezamos la semanita de vuelta a la cruda realidad (y encima en Valencia aún tienen fiesta y mis padres una semana de vacaciones grrrr…) con mis inicios en Instagram.







¿Sois instagramers?
PD: Como siempre, por adablanes me encontraréis.
aaaaaaaaaaaaai lo seria si pudieraaaaaaa