Hoy vuelve a tocar ñam ñam. Y es que si los papis vienen un finde, hay que aprovecharse ;). Así que os voy a contar la cenita que nos concedimos el sábado por la noche en pleno centro de Madrid, en uno de los pocos sitios en los que se podía entrar porque estaba todo abarrotadísimo tras la marcha del 15O.
El restaurante está dentro de un hotelazo de 5*GL llamado Urban Hotel, situado en la Carrera de San Jerónimo (un poco más arriba que el Congreso de los Diputados, en la acera de enfrente). El hotel es de esos modernos que a mí tanto me gusta cotillear, aunque dude que alguna vez -al menos de momento- pueda permitirme alojarme en ellos. Decoración trabajadísima, con materiales evidentemente carísimos (mirad sino, la enorme columna de onix) y con muebles de diseño reconocibles.
El restaurante (Europa Déco) sigue la misma línea y mantiene una decoración muy cuidada y moderna, con iluminación digitalizada, paneles acristalados, chimenea forrada en pan de oro y sillería con pies de acero tapizadas con piel de textura de iguana. Ni siquiera había manteles, sino una especie de láminas de piel que seguían totalmente las tendencias de la temporada: dorado + estampado rugoso.
Pero pasemos a la comida, que es lo que verdaderamente importa ;). Nosotros nos decidimos por un menú cerrado que incluía un primero, un segundo de carne, otro de pescado y un postre, servidos con Champagne Perrier Jouët Grand Brut (el pan, el y el agua mineral también estaban incluidos, cosa que hoy en día se agradece para que no haya sorpresas en la factura final). El menú daba a elegir entre dos primeros, dos pescados, dos carnes y dos postres… sin embargo, sólo os puedo comentar una de las opciones de cada porque en este caso hubo total unanimidad familiar (aunque no sea lo habitual). Y esto es lo que tomamos:
Primero: Ensaladilla de atún rojo con espárragos
Pescado: Tempura de bogavante en sopa de verduras
Carne: Tartar de solomillo de ternera con huevo de codorniz
Postre: Espuma de caramelo, helado de vainilla y mousse de chocolate Guanaja
Resopón: Daditos de manteca azucarada, gominolas de naranja, almendrados y daditos de chocolate
Nada que objetar salvo que tal vez el tartar estaba un pelín picante para mi gusto y que el Guanaja -pese a tener un tamaño considerable- siempre se acaba demasiado pronto ;).
PD: Sé que os estáis preguntando cuánto vale. 60 por persona. ¿Qué os parece? ¿Os esperábais más o menos?
Tempura de bogavante en salsa de verduras…¡¡no diré más!! OMG
mmmmm Que fam! Mirar estes coses en horari de dinar és un pecat!qué bona pinta te tot!
A mi em pareix caaaar! jaja, ja em coneixes…